Y para finalizar escucharéis la canción de "Celtas cortos" y tendréis que hacerles caso. Tendréis que inventar un cuento y contárselo a vuesto profe. A ver quien hace el mejor cuento...lo mismo se lo cree
Redacción: Cuéntame un cuento........... Todos el 18 de junio
Poesía: Ronda de San Juan.................... Todos el 19 de junio
La poesía que tendréis que presentar es la siguiente:
RONDA DE SAN JUAN
Abrid mocitos la puerta que ya hora de rondar, noche linda de verano, noche clara de San Juan, noche linda de verano, noche clara de San Juan.
Al cortar el trebole, el trebole voy a, al cortar el trebole la noche de San Juan. (x 2)
Hacia la fuente serena todos los mocitos van, todos los mocitos iban, nadie se quiso quedar, todos los mocitos iban, nadie se quiso quedar.
Al cortar el trebole… (x 2)
Nochecita de San Juan, nochecita de San Juan, cuando volvian los mozos los gallos cantaban ya, cuando volvian los mozos los gallos cantaban ya.
Cuéntame un cuento Y veras que contento Me voy a la cama Y tengo lindos sueños
Pues resulta que era un rey Que tenia tres hijas Las metió en tres botijas Y las tapo con pez Y las pobres princesitas Lloraban desconsoladas Y su padre les gritaba Que por favor se callaran
Cuéntame un cuento
Las princesas se escaparon Por un hueco que existía Que las llevo hasta la vía Del tren que va para Italia Y en Italia se perdieron Y llegaron a Jamaica Se pusieron hasta el culo De bailar reggae en la playa
Cuéntame un cuento
Bailando en la playa estaban Cuando apareció su padre Con la vara de avellano En la mano amenazando Fue tras ellas como pudo y Tropezó con la botella Que tenia genio dentro Que tenia genio fuera
Cuéntame un cuento
Les concedió tres deseos Y ahora felices estamos Y…
Un homenaje al gran poeta andaluz D. Antonio Machado
Pares 5 de junio
Impares 12 de junio
Cantares...
Todo pasa y todo queda,
pero lo nuestro es pasar,
pasar haciendo caminos,
caminos sobre el mar.
Nunca perseguí la gloria,
ni dejar en la memoria
de los hombres mi canción;
yo amo los mundos sutiles,
ingrávidos y gentiles,
como pompas de jabón.
Me gusta verlos pintarse
de sol y grana, volar
bajo el cielo azul, temblar
súbitamente y quebrarse...
Nunca perseguí la gloria... Caminante son tus huellas
el camino y nada más;
caminante, no hay camino
se hace camino al andar.
Al andar se hace camino
y al volver la vista atrás
se ve la senda que nunca
se ha de volver a pisar.
Caminante no hay camino
sino estelas en la mar...
Hace algún tiempo en ese lugar
donde hoy los bosques se visten de espinos
se oyó la voz de un poeta gritar
"Caminante no hay camino,
se hace camino al andar..."
Golpe a golpe, verso a verso...
Murió el poeta lejos del hogar.
Le cubre el polvo de un país vecino.
Al alejarse le vieron llorar.
"Caminante no hay camino,
se hace camino al andar..."
Golpe a golpe, verso a verso...
Cuando el jilguero no puede cantar
cuando el poeta es un peregrino,
cuando de nada nos sirve rezar.
"Caminante no hay camino,
se hace camino al andar..." Golpe a golpe, verso a verso...
Así es mi vida,
piedra,
como tú. Como tú,
piedra pequeña;
como tú,
piedra ligera;
como tú,
canto que ruedas
por las calzadas
y por las veredas;
como tú,
guijarro humilde de las carreteras;
como tú,
que en días de tormenta
te hundes
en el cieno de la tierra
y luego
centelleas
bajo los cascos
y bajo las ruedas;
como tú, que no has servido
para ser ni piedra
de una lonja,
ni piedra de una audiencia,
ni piedra de un palacio,
ni piedra de una iglesia;
como tú,
piedra aventurera;
como tú,
que tal vez estás hecha
sólo para una honda,
piedra pequeña
y
ligera...
Pares 22 de mayo
Impares 29 de mayo
Redacción:Vacaciones en la primera colonia de Marte
Allí por donde despereza el sol, y el horizonte se hace fina arista, entre cerros, guardianes de nuestra Úbeda sobria, señorial y renacentista, surge un Colegio de Luz y Vida donde esfuerzo y saber se dan cita.
Juan Pasquau que nos diste tu nombre, alma mater de nuestro humilde ser, hoy eres insignia en nuestro pecho, ejemplo para un nuevo amanecer.
Colegio Juan Pasquau que unes personas y saber, entre libros y juegos por siempre te he de querer.
Libre colegio de amplios contornos, tus muros dejan ecos del ayer: niños y niñas las tablas cantando, con alegría aprendiendo a leer.
Verdes patios con azules de infancia, que nos ayudan sanos a crecer.
Entre gritos y nubes de juegos, puro nácar que nunca ha de volver, todos, las manos unimos por siempre, en equipo lograremos vencer.
Colegio Juan Pasquau que unes personas y saber, entre libros y juegos por siempre te he de querer.
En tus aulas nos nace la causa que a todos nos ha de fortalecer; profesores, compañeros y padres dan forma a un racimo de sueños, que prometemos siempre defender.
Quijote amigo de nuestro saber, tus valores ya son nuestra sangre, tus lecciones de siempre, senderos por los que camina nuestro deber.
Patrimonio para las gentes de Úbeda, íntimo orgullo de nuestro ser, Colegio en ti nunca habrá ocaso, bien sabemos que educar es querer.
Colegio Juan Pasquau que unes personas y saber, entre libros y juegos por siempre te he de querer. P.G.L
Atravesé la eternidad y descubrí tras de una nube alguien, un caballo con alas viene hacia mí. ¿Quién eres tú?¿Qué haces aquí? Has de saber que yo soy Rocinante, vivo alejado, el coche me desplazó.
Don Quijote me abandonó, cambió su lanza por un tractor. ¡Harto ya!...
Pobre hidalgo cómo luchó, quiso cambiar el mundo por su sueño, no comprendieron, se rieron de él. Dulcinea le convenció, con Sancho Panza montaron un negocio, una tienda de accesorios para el tractor.
Don Quijote me abandonó, cambió su lanza por un tractor. ¡Harto ya!...
Hiciste bien en quedarte aquí, en este valle de paz, todas las cosas que allí ya no están, acompañan tu soledad. Todo lo bello lo he visto aquí no necesitas más...
Tal vez quieras venir conmigo en este viaje infinito, vente conmigo buen Rocinante a descubrir lo eterno, bate tus alas al viento... Iré contigo más allaaaaa...
Aaaaaaaa... Aaaaaaaa...
Redacción: Don Quijote y Sancho me invitaron a una aventura por tierras de La Mancha.
"Con que facilidad se confunde belleza y bondad" Antonio Machado
Nació el 26 de julio de 1875 en el palacio de Dueñas, propiedad de los duques de Alba en Sevilla.
Fue
el segundo de cinco hermanos de una familia liberal progresista, hijo
de un eminente folcklorista recopilador de la poesía popular andaluza.
Su
abuelo, Antonio Machado Núñez era médico y profesor de Ciencias
Naturales y hombre de profundas convicciones liberales, motivo que le
indujo a unirse a la Junta Revolucionaria de Sevilla; el padre, Antonio
Machado Álvarez, amigo de Joaquín Costa y de Francisco Giner de los Ríos,
colaboró con la prensa republicana, dirigió la Biblioteca de
Tradiciones Populares y publicó numerosos estudios sobre folclore
andaluz y gallego.
Perteneciente al movimiento literario de la Generación del 98. Hermano de otro ilustre literato, Manuel Machado, junto al que escribe obras de teatro.
En 1883, tras ser el abuelo nombrado profesor de la Universidad Central
de Madrid, toda la familia se traslada con él a la capital de España.
Allí completará su formación intelectual, liberal y progresista, al
entrar como alumno en el Instituto Libre de Enseñanza.
En 1893 publica sus primeros trabajos en prosa en La Caricatura,
revista que se publicó en Madrid en los años 1892 y 1893. Su primer
viaje a Francia lo hace con su hermano Manuel en 1899, trabajando como
traductor de español para la Casa Garnier. Su estancia en París le pone
en contacto con los poetas simbolistas franceses, principalmente con Paul Verlaine y con el poeta nicaragüense Rubén Darío. Fruto de todo ello es la publicación en 1903 de su primer poemario "Soledades", que le da a conocer en el programa literario, y donde hace alarde de la estética modernista.
En 1907 obtuvo la cátedra de Lengua Francesa en un instituto de Soria, ciudad que marcará su vida y su obra. En la pensión donde vive conoce a Leonor Izquierdo Cuevas,
hija de la dueña. Se casan el 30 de julio de 1909 en la Iglesia de
Santa María la Mayor (Soria). Hacía un mes que Leonor había cumplido
quince años y el poeta tenía treinta y cuatro. Leonor enferma y muere en
menos de tres años de tuberculosis.
Trabajaba en Campos de Castilla y colabora en los periódicos de Soria, y en La Lectura de Madrid, publica Proverbios y Cantares. En 1910 con una beca de un año de duración para estudiar filología francesa en París, y va a la Sorbona, a los cursos de Henri Bergson. En los años sucesivos vive en Segovia y Madrid, donde le nombran en 1927 miembro de la Real Academia Española, aunque nunca llegó a tomar posesión de su sillón.
La
sencillez y sobriedad de su poesía y las sinceras reflexiones que lo
humanizan y acercan al pueblo, han hecho de él uno de los poetas
emblemáticos de los defensores del alcance popular de la poesía. Su
primer libro "Soledades", se publicó en 1903. En 1912 se publica "Campos
de Castilla". En 1917 se publicaron "Páginas escogidas", y la primera edición de "Poesías completas". De esa época es de destacar también la obra en prosa "Los complementarios". Después apareció "Nuevas canciones",
de 1914, en la que prosigue con la línea sentenciosa y filosófica.
Además, aparecieron otras ediciones de "Poesías completas", en 1928 y
1933, con la aparición de dos apócrifos, "Juan de Mairena" y "Abel Martín". El teatro escrito por los hermanos Machado se escribe y estrena entre 1926 (Desdichas de la Fortuna o Julianillo Valcárcel) y 1932 (La duquesa de Benamejí) y consta de otras cinco obras, además de las dos citadas. Son éstas: Juan de Mañara (1927), Las Adelfas (1928), La Lola se va a los puertos (1929) y La prima Fernanda (1931), escritas todas en verso, lo mismo que Julianillo Valcárcel, y El hombre que murió en la guerra,
escrita en prosa y no estrenada hasta 1941. La Duquesa de Benamejí está
escrita en prosa y verso. Asimismo, adaptaron para la escena los
hermanos Machado comedias de Lope de Vega como El Perro del Hortelano o La Niña de Plata, así como Hernani de Víctor Hugo. En 1936, apareció el libro en prosa, Juan de Mairena.
Caminante, son tus huellas
el camino y nada más;
Caminante, no hay camino,
se hace camino al andar.
Al andar se hace el camino,
y al volver la vista atrás
se ve la senda que nunca
se ha de volver a pisar.
Caminante no hay camino
sino estelas en la mar.
¡Oh, la saeta, el cantar
al Cristo de los gitanos,
siempre con sangre en las manos,
siempre por desenclavar!
¡Cantar del pueblo andaluz,
que todas las primaveras
anda pidiendo escaleras
para subir a la cruz!
¡Cantar de la tierra mía,
que echa flores
al Jesús de la agonía,
y es la fe de mis mayores!
¡Oh, no eres tú mi cantar!
¡No puedo cantar, ni quiero
a ese Jesús del madero,
sino al que anduvo en el mar!